La pandemia avanzaba en Uruguay, las personas se encontraban realizando distanciamiento social y tratando de no tener contactos más allá de lo necesario.

Necesidad
En este contexto los adultos mayores eran los más afectados y aquellos que debían tener mayor cuidado. Sin embargo, nos sorprendió un brote en un Residencial de Ancianos. Surgió entonces la necesidad de contar con información sanitaria de estos lugares para controlar la situación. En un plazo de 48 horas, se desarrolló una aplicación para Residenciales de Adultos Mayores. En ella se registraron los datos de los residentes y del personal.
Solución
Se creó una serie de formularios, que permiten ingresar información del residencial, datos personales de cada uno de los residentes, así como una valoración clínica de la sintomatología que podían presentar. Además de datos personales de los trabajadores que estaban en contacto con los adultos mayores.
Cuando la información que se ingresaba en el sistema correspondía a un residente con síntomas de la enfermedad, esos datos eran derivados al Plan Nacional Coronavirus para su posterior seguimiento clínico.
Resultados
La creación de la aplicación de Residenciales ha permitido conocer el número exacto de residentes y de funcionarios, pudiendo identificar a aquellos que se encontraban no habilitados.
La aplicación con el transcurso del tiempo ha ido evolucionando, y una vez transcurrida la situación de alarma dentro de los residenciales, es usada como una herramienta de control.
Se pudieron registrar más de 1200 residenciales, que contaban con más de 3500 funcionarios y 10 mil residentes.